¡Un desayuno o una cena perfecta!

Descongelamos el salmón ahumado en la nevera durante la noche anterior.

Cocinamos a fuego lento los guisantes en agua con sal durante 5 minutos. Mientras tanto, cortamos las cebolletas a rodajas.

Hacemos un puré con los guisantes, las cebolletas, la leche, dos huevos, la harina de espelta, sal, pimienta y la nuez moscada.

Calentamos el aceite en una sartén y vertemos 4 cucharadas grandes de masa cocinándolas a fuego medio durante aproximadamente 4 minutos por cada lado. Hacemos lo mismo con el resto de la masa.

Mientras tanto, separamos la carne del aguacate de la piel y la aplastamos finamente con un tenedor. Rallamos la cáscara del limón y exprimimos su jugo. Agregamos la mitad del jugo, la cáscara y las hierbas y mezclamos todo bien. Condimentamos con sal y pimienta.

A continuación, ponemos a hervir agua salada y vinagre. Abrimos los huevos individualmente en una taza y con la ayuda de una cuchara, los agregamos cuidadosamente al agua de forma gradual para que no se peguen. Cocinamos los huevos en agua hirviendo durante 4 minutos.